Disfrutar de un deportivo interpretado al estilo Porsche, supone sentir la potencia, la emoción y la diversión de una conducción que responde extraordinariamente en todo momento y en cualquier circunstancia, con una agilidad y seguridad solo reconocibles en un digno heredero del legendario Porsche 718, y que se suma a nuestro compromiso con el medio ambiente gracias a una increíble reducción del consumo que ahora ofrece su característico motor bóxer central.

En el año 1996, y bajo la influencia de los diseños del 356 y del 550 Spyder, se desarrolla el primer Boxster. Motor central, centro de gravedad bajo y construcción ligera, con un motor de 2.5l, que rendía 204CV. Su nombre resulta de la unión de los términos bóxer y roadster.